Hace tiempo hablamos en nuestro blog de los tipos de alquiler de inmobiliario que existen y explicamos cada uno de ellos, desde el alquiler social, el alquiler de vivienda habitual o el alquiler de piso compartido. Esta vez vamos a ir un poco más allá y vamos a hablar de los modelos de gestión de alquileres que podemos encontrarnos.
La gestión integral del alquiler es un servicio que está disponible tanto para particulares como para empresas que cuenten con viviendas en alquiler y quieran olvidarse de toda la gestión que conlleva, sin importar el número de pisos que tenga. Si quieres conocer un poco más sobre la gestión integral del alquiler te dejamos un enlace a nuestro artículo sobre ello.
Modelos de gestión del alquiler
Para conocer un poco más sobre cómo gestionar correctamente las viviendas alquiladas, lo mejor es saber qué modelos de gestión existen hoy en día. En este artículo te decimos cuáles son esos modelos dependiendo del tipo de alquiler y la gestión de los suministros.
Gestión de alquiler de piso completo o por habitaciones
En este supuesto hay que tener en cuenta el comisionado de honorarios donde el gestor se encarga de centralizar todos los cobros que se van generando. Después lleva a cabo la liquidación al propietario de la cual se descuentan los honorarios que correspondan, además de posibles anticipos que se hayan dado por incidencias en la vivienda.
El gestor puede o no centralizar los cobros de los inquilinos. El modelo más habitual y la mejor práctica es que el gestor centralice cobros de los inquilinos y posteriormente liquide al propietario. La principal ventaja de este modelo es que el propietario se despreocupa por completo de la gestión del inmueble realizando tareas como la revisión de su cuenta bancaria para ver si el inquilino paga al pagar estos directamente a los gestores, teniendo éstos así el control y la visibilidad de los pagos.
En el segundo modelo es el inquilino el que paga el alquiler directamente al propietario. El trabajo del gestor es controlar los cobros si el inquilino comparte el justificante del pago o incluso tener acceso a la cuenta bancaria del propietario, aunque este último caso no es muy común.
Otro caso que se suele dar en la gestión de alquiler de piso completo o por habitaciones es el subarriendo o cesión del alquiler del inmueble. En esta situación el gestor se convierte en el arrendatario de la vivienda y es el que se encarga de abonar la renta al dueño real del piso, al que se lo está arrendando.
Mientras, por otro lado, el gestor está subarrendando o alquilando de nuevo el inmueble a un precio superior, ya sea al completo o por habitaciones, y consigue el beneficio de la diferencia entre el precio al que subarrienda a los inquilinos y al que alquila.
La gestión de los suministros
Sin duda, la gestión de los suministros es una de las dudas que más suelen surgir a la hora de alquilar una vivienda. Hacerlo correctamente puede evitar muchos problemas y evitar que sea un trámite engorroso y convertirse en algo sencillo. Por eso, a la hora de realizar una correcta gestión del alquiler, los suministros juegan un papel muy importante.
Dentro de esta gestión se incluyen los siguientes puntos:
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– Cambio de cuenta o titularidad. El inquilino es el titular de los suministros o es su cuenta bancaria la asociada al contrato, por lo que el gestor o el propietario no son los encargados de gestionarlos. Teniendo esto en cuenta, el coste de los suministros lo carga el proveedor del servicio directamente a los inquilinos.
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Muchas personas no saben cómo hacer ese cambio de titular o desconocen a dónde tienen que llamar para realizar ese trámite. Si el propietario no quiere realizarlo, el gestor del alquiler es el que se encargará de llevarlo a cabo.
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– Anticipo de los suministros. En este caso el gestor realiza un cobro mensual con importe fijo en concepto de anticipo de suministros. El gestor tiene que controlar ese anticipo que se ha cobrado respecto al gasto real del suministro y lo hará revisando el debe/haber con los inquilinos.
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Esa diferencia se puede cobrar o liquidar con los inquilinos después del periodo establecido, por ejemplo 6 meses o un año o también puede asumir los gastos el gestor.
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– Repercusión de los suministros. Aquí simplemente se repercute al inquilino el importe real del suministro cuando el proveedor del servicio carga el importe al gestor.
Contar con una empresa que se encargue de gestionar el alquiler de la vivienda es una buena opción para los propietarios ya que les ayuda a estar tranquilos y saber que su inmueble está bien gestionado y ellos cobrarán rigurosamente todos los meses su renta. Para las empresas de gestión, poder trabajar con las mejores herramientas de gestión de alquileres también es fundamental para tener todo controlado.
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